Clásico!! el niño pregunta y te agarra en curva y de pronto no sabes si empezar por la vieja historia de la cigüeña, la de las abejitas o de plano finjir demencia. Calma! debes empezar por tomarlo con naturalidad y sin escandalizarte porque los niños leen perfecto tu lenguaje no verbal. Ese que con una sola mirada le dices "de eso no se habla" o "¿cómo se te ocurrió eso?".
Una vez que respiras profundo es importante tomar en cuenta la edad del peque, no es lo mismo que lo pregunte un niño de 5 años a uno de 9 así que es mejor que te prepares psicológicamente y abras un espacio para hablar de "eso" antes de que sus compañeros de colegio se te adelanten y generen más dudas en tu hijo que lejos de ayudarlo servirá para que se confunda.
No es necesario ser demasiado explícita ni ponerte nerviosa, trata ante todo de no mentir y más bien ser lo más apegada posible a una realidad científica que con el tiempo irá conociendo mediante la escuela y sabrá que le decías la verdad. Por ejemplo para un niño de edad preescolar bastará con explicarle que se necesitan de dos células (semillas si quieres), una de mamá y otra de papá para formar un nuevo bebé y que esta nueva célula necesita estar calientita y protegida por lo que el mejor lugar es la pancita de mamá.
Para niños de primaria, antes del 3er grado hay que decirlo de una forma más clara pues si los han revisado, sus libros de texto ya vienen con un contenido en materia de sexualidad que orientan y facilitan a los padres abordar el tema. Aqui el punto (creo yo) es condimentar con un toque de valores, es decir, explicarles que esta unión es libre, decidida y en un contexto de amor y unidad. Al mismo tiempo servirá para prevenir otro tipo de situaciones en donde quedará claro que los adultos se quieren y se besan entre adultos, jamás un adulto besa o acaricia a un niño.
Por otra parte y hay que decirlo, estan los niños que por desgracia han estado expuestos a un alto contenido de erotismo y pornografía vía telenovelas, películas en horarios no apropiados y sobre todo internet.
Esos niños a quienes los papás les permiten sin vigilancia ni reserva alguna el acceso a cualquier tipo de información sufren de una confusión terrible pues no entienden que lo que ven sus ojitos es una franca distorsión de la realidad. Estos mismos niños son quienes portan en sus cerebros y en sus celulares videos o fotografías con contenido altamente explícito y luego se los transmiten a chavitos más ingenuos y entre la curiosidad y la adrenalina se vuelve una cadena de desinformación, confusión y riesgos innecesarios.
Aqui es donde vale la pena replantearnos ¿hasta donde estamos dispuestos a abrir el portal de la confianza y la comunicación con nuestros niños? pues en materia de sexualidad debemos ser muy abiertos y confiables con nuestros hijos y hablar de ello no solo una vez sino cada vez que sea necesario, cada vez que vayan cambiando de etapa, a los 4, a los 6, a los 9, a los 12 a los 18... en fin... todo con el objetivo de que crezcan con una sexualidad sana y sin mitos no crees?? al final solo tu tienes la última palabra.
Saludos!!
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